Como me suele pasar, escucho una pieza y me cautiva. Esta vez ha sido una obra de Kirchner, que me ha costado algo más de lo que me esperaba. Por ejemplo, en la cuestión del ritmo, se contrapone ritmo binario con ternario de una forma más complicada de lo habitual (me recuerda a una pieza de Rachmaninov) aunque al final ha salido. Luego un acorde a diez dedos que nunca había hecho. Una mano izquierda que necesita ser ágil, un acorde en la derecha mayor que una octava, con salto...en fin, todavía la estoy practicando pero necesitaba grabarla para marcar un hito y seguir mejorándola más adelante.